DIARIO REFLEXIVO 7
TWITCH
La clase de hoy me ha resultado bastante interesante, puesto que, aunque sí que había oído a hablar sobre Twitch, nunca la había utilizado.
Mis compañeros han hablado sobre el uso de la plataforma Twitch como herramienta educativa, y no puedo dejar de pensar en las posibilidades que se abren desde esta mirada tan innovadora. Sinceramente, yo siempre había asociado Twitch exclusivamente al mundo del videojuego, al entretenimiento juvenil o a creadores de contenido famosos como Ibai Llanos o Auronplay. Sin embargo, mis compañeros han conseguido desmontar esa visión parcial y enseñarnos que esta plataforma puede ser mucho más: un recurso didáctico con un potencial enorme para fomentar la creatividad, la participación y la expresión en el aula.
Figura 1. Logo Twitch
Fuente: https://www.elternguide.online/en/twitch-the-streaming-platform-for-gamers/
Uno de los aspectos que más me llamó la atención de la exposición fue su vinculación con el ámbito de la expresión plástica. Se nos mostró cómo Twitch puede utilizarse para emitir en directo sesiones de dibujo, pintura, diseño gráfico o ilustración digital. La idea de que los niños y niñas puedan mostrar sus creaciones en tiempo real, explicar sus procesos artísticos, recibir comentarios de sus compañeros o incluso colaborar en tiempo real en una misma obra me pareció una forma revolucionaria de repensar la educación artística.
Además, se destacaron diferentes técnicas pedagógicas adaptadas a la plataforma: desde la transmisión educativa tradicional, hasta metodologías participativas, lúdicas o reflexivas. Me llamó especialmente la atención el uso de Twitch para realizar proyectos en equipo donde los alumnos asuman diferentes roles: presentadores, técnicos, ilustradores, guionistas o moderadores del chat. Esta transversalidad me parece fantástica para integrar la expresión plástica con otras áreas del conocimiento y fomentar en el alumnado una visión holística y significativa del aprendizaje.
Figura 2. Niños utilizando la plataforma
También se abordaron los riesgos y las consideraciones éticas: la necesidad de moderar los chats, proteger la identidad de los menores y fomentar un uso responsable y reflexivo de la tecnología. Me pareció muy importante que no se perdiera de vista este enfoque crítico y ético, que a veces se descuida cuando hablamos de innovación. En este caso, lo digital no sustituye lo humano, sino que lo potencia.
En conclusión, esta exposición ha sido una invitación a mirar más allá de los límites del aula, es decir, a imaginar nuevas formas de enseñar y aprender y, en definitiva, a explorar las herramientas digitales con una actitud creativa crítica y comprometida. Esto no solo me ha despertado nuevas ideas de enseñar sino que también me ha confirmado algo que cada vez tengo más claro; la educación artística no tiene fronteras, y como futuros maestros, tenemos la responsabilidad de crear puentes entre el arte, la tecnología y la vida.
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